Nacido en Barcelona, siempre he sentido una profunda pasión por la música desde mi infancia. Como melómano incansable, suelo frecuentar los teatros de ópera, incluso entre bastidores, llevando siempre conmigo mi grabadora y micrófono.
Gracias a mi actividad “corsaria”, fui reconocido como el “viajero entrometido” en el programa La Barcaccia de RAI Radio 3, conducido por Enrico Stinchelli y Michele Suozzo.
Como si mi interminable parloteo no fuera suficiente, desde 1986 contribuyo con artículos a la revista milanesa “L’Opera”, bajo la dirección de Sabino Lenoci.
Soy corresponsal italiano de la revista mensual española Opera Actual desde su primer número.
He estado publicado reseñas en la “Columna del Impiccione Viaggiatore” del sitio web “I Teatri dell’Est”.
En el pasado, colaboré con varios periódicos internacionales y sitios web de diversas latitudes y longitudes. Además, he producido e interpretado ensayos para programas de conciertos, conferencias y presentaciones de óperas y operetas en Italia y España, siendo completamente bilingüe.
La opereta y la Zarzuela, género teatral español, constituyen mi especie de patio trasero personal. En Trieste, seguí el curso del Festival de Opereta desde 1970, frecuentando a artistas que dieron prestigio al género en Italia. Dos figuras destacadas fueron la siempre verde Daniela Mazzucato y el inolvidable Sandro Massimini, con quien colaboré en la dramaturgia de los espectáculos de su compañía.
He estado publicando reseñas en la “Columna del Impiccione Viaggiatore” del sitio web “I Teatri dell’Est”.
En el pasado, colaboré con varios periódicos internacionales y sitios web de diversas latitudes y longitudes. Además, he producido e interpretado ensayos para programas de conciertos, conferencias y presentaciones de óperas y operetas en Italia y España, siendo completamente bilingüe.
La opereta y la Zarzuela, género teatral español, constituyen mi especie de patio trasero personal. En Trieste, seguí el curso del Festival de Opereta desde 1970, frecuentando a artistas que dieron prestigio al género en Italia. Dos figuras destacadas fueron la siempre verde Daniela Mazzucato y el inolvidable Sandro Massimini, con quien colaboré durante unos seis años en la dramaturgia de los espectáculos de su compañía.
En 2002, fui el autor de la adaptación libre argentina de “Las conveniencias e inconvenientes del teatro” de Donizetti, representada bajo mi dirección en el Teatro Margherita Xirgu de la capital sureña con el título “¡Viva la Mamma!”.